sábado, 8 de octubre de 2011

Sobre nuestro piso ó Bollywood rent (I part).

La búsqueda de piso en Auckland está siendo durilla, más que nada porque hemos ido contrarreloj: había que conseguir un techo antes de que se nos acabase la estancia en el backpacker.
Que la Rugby World Cup esté aquí no ayuda, esto se traduce en más gente, menos espacio y mayores precios. Ante este panorama y nuestra alentadora situación, decidimos buscar una habitación para compartir los dos, al menos hasta que se acabe el mundial (a finales de octubre). Los precios rondan los 180NZD semanales (unos 100eur) por habitación, normalmente en ese precio se incluye la luz y/o alguna otra factura, pero siempre depende.
El jueves teníamos que dejar el backpacker y el miércoles por la mañana conseguimos nuestra primera cita para ver una habitación doble, 130NZD… digamos que el espacio y el jabón brillaban por su ausencia.
Volvimos a la biblio para seguir buscando y, justo cuando ya me iba a ir, vi un anuncio de una habitación por 95NZD, estaba en el centro y tenia buena pinta, “tiene que haber tongo” pensé, pero concerté una cita con el tipo para esa misma tarde. El piso molaba (nuevo, bien equipado, terracita, bien situado), estaba limpio, la habitación era amplia, el otro inquilino (indio) parecía normal y el precio no estaba mal (180NZD semanales, porque resulta que aquí, si os metéis 2 en una misma habitación, te duplican el alquiler… lógico y normal verdad?) así que decidimos cogerlo, just on time!
El jueves por la mañana nos mudamos. Cuando llegamos al edificio bajaron a buscarnos nuestro compañero y otro indio, fue muy graciosa la cara de Lara cuando ambos dos me cogieron mis maletas mientras ella se peleaba con sus bultos.
Empiezan las rarezas.
Mientras estamos acomodándonos, nuestro compañero sale del piso y vuelve a entrar con una chica a la que enseña el piso y su habitación… blanco y en botella no? dedujimos que la iba a alquilar también. Perfecto, conocimos a una chica en el backpacker que iba a estar interesada. Se lo decimos a él y nos dice, primero que no, y luego que lo tiene que pensar, que ya nos avisará. Segunda deducción: él es el casero o subalquila.
Cuando llegamos por la noche nos dice que antes de meternos a dormir va a venir el casero a hablar con nosotros… ¿?... y aparece un colega que estaba el primer día que vinimos a ver el piso y que parecía amigo de nuestro compañero... El sujeto en cuestión me entrega un listado de “buena convivencia” para que lo leamos y lo firmemos, entre sus múltiples puntos me llama la atención uno que dice que en la terraza no puedo tener una bici ni fumar, pero sí puedo tener una barbacoa… aha…
En fin, como sólo nos habían dado una llave, le pedimos otra, y entonces nos habla de que hay un manager, que es el que lleva eso y que hay que pagarle 40NZD por la llave… esto es peor que solicitar la tarjeta de residente para el coche en Madrid!!
Por otra parte, nadie nos dijo nada del alquiler de la otra habitación, así que tercera deducción: no alquila su habitación.
En este punto la rubia ya decidió que los indios le caen mal, que la ponen de mala leche y que quiere perderlos de vista.
Hoy (ayer para vosotros) salimos de casa y cuando volvemos, a la hora de comer, nos encontramos a (dos puntos) el que se supone que es nuestro compañero de piso, el que se supone que es el casero y dos indios más que nos presentan como “vuestros compañeros de piso” ¿¿Perdona??.... compañeros que, cuando se piran los otros dos, nos piden nuestra única llave porque ellos no tienen ¡¡¡¿¿¿PERDONA???!!! Pues perdona pero no! (la rubia ya muy mosqueada).
Total, que esto es la verbena de la paloma en versión Bollywood, disfrutamos de la casi constante compañía de el que se supone que es nuestro casero, de el que se suponía que era nuestro único compañero y de los dos que, oficialmente, lo son... Qué bonita estampa familiar!
Asi que mañana (hoy para vosotros) nos vamos a ver un piso entero, vacío, de un matrimonio majísimo en el que depositamos todas nuestras esperanzas para poder pirarnos de aquí lo antes posible y montar nuestra propia verbena de la paloma, ¡pero con derecho de admisión!.
Seguiremos informando… 

P.D: Aqui is dejo documentación visual de lo que puede ser un backpacker hindú:
 El baño
 Lavadora y secadora
 La cocina
 La habitación patera
 Nuestro remanso de privacidad

1 comentario:

  1. Jajajajajaj esta es de las cosas que luego salen en las series americanas y piensas: "¿De dónde sacarán los flipaos de los guionistas estas cosas?"
    Ánimo y pa´lante!

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